Desde hace más de 20 años el término «arte callejero» comenzó a circular, primero por las calles de Londres y luego por otras ciudades del mundo. Hoy en día, Chile es uno de los países que más se destacan por el arte que se puede ver en sus calles. Artistas como Inti Castro, Basco Vazko, Cekis, Henruz-Koshayuyo, Piguan-Naira o la Brigada Negotrópica, y abarcan temáticas tan diversas como el conflicto mapuche, la muerte de Mauricio Morales (Punky Mauri), las mujeres, la poesía de Nicanor Parra o todos los motivos de la naturaleza que uno pueda imaginar. han plasmado su arte en diferentes barrios de la región. El Barrio Yungay se destaca por la inexistencia de un muro sin graffitis. Todos destacan por usar fuertes colores, y en muchos casos, con un vínculo claramamente ecologistas.
Algunas son un mar de manchas ininteligibles, de voces apagadas y de colores deslavados por la lluvia y el sol. Otras resisten estoicas el paso del tiempo y de las miradas y se quedan ahí quietas, esperando la mente activa interprete sus mensajes. Las paredes del Barrio Yungay están construidas de adobe, de cemento y de polifonía. De color ladrillo, de stencil negro y de cromatismo callejero. De líneas rectas y de trazos caóticos. No hay silencio posible cuando uno camina atento y tranquilo por las calles del barrio poniente del centro de la ciudad.
1. Mural en calle Cueto (entre Compañía de Jesús y Huérfanos). 2. Mural realizado por Rodrigo Estoy que integra uno mayor realizado por Santana, Naska, Piri y Paz (Galería Urbana, Retratos Elementales). 3. Mural “El mero mero de una tierra elemental”, en calle Huérfanos esquina Libertad. 4. Mural en calle Cueto (entre Compañía de Jesús y Huérfanos).